El post de Gonzalo Bonadeo en su blog

Hagámosle el aguante

Nadie puede creer que la misma Georgina Bardach tercera en Atenas o finalista en el Mundial de Melbourne hace un año sea la misma que acaba de terminar penúltima en sus dos especialidades. Especialmente en la de 400 combinados. Imagino innumerables especulaciones sobre el motivo de su rendimiento y hasta acabo de leer un correo de un amigo que me preguntaba si no habría sido una represalia por el asunto de la falta de apoyo oficial a su carrera.

Los Bardach son gente de deporte de mucho tiempo; por formación genetica y por respeto a la natación, es imposible que Georgina vaya para atrás. Es más, horas antes de venir a China me contó de su enorme ilusión de ir a Londres 2012 a competir junto con su hermana menor –gran saludo desde Pekín, Jennie- y de que si bien estos juegos iban a ser de transición, habia recuperado las ganas de nadar después de un tiempo de mucho desánimo: está claro, si en la Argentina no tenemos la menor idea de cómo cuidar e incentivar nuestros talentos, a menos que ganemos plata con ello.

Sin embargo, sospecho que las de Pekín deben haber sido las dos peores carreras de su vida. Y, de haber sido posible, imagino que hubiese querido salir de agua antes del final al ver que el ánimo tiraba para abajo lo que los brazos y las piernas intentaban mantener a flote.

Creo saber lo que le pasó a Georgina. Y me da muchísima pena porque se lo buena gente y lo enorme deportista que es.

Los periodistas no ejercemos una profesión colegiada y, como tales, estamos lejos de hacer juramentos hipocráticos como los médicos. En este caso, me voy a permitir violar ciertas obligaciones no escritas que tenemos algunos hombres de medios y voy a pedirles que, aún sin decirles el por qué, me crean que la cordobesa tuvo el alma demasiado vacía como para volver a regalarnos su talento.

Quédense tranquilos. Pronto volverá a emocionarnos. Hoy, hagámosle el aguante.

Extraído del blog de Gonzalo Bonadeo, un periodista en serio.
http://gonzalobonadeo.blog.arnet.com.ar/archive/2008/08/11/hoy-mas-que-nunca-a-bardach-le-hago-el-aguante.html#comments